Artesanía

El proceso de fabricación de nuestras baldosas es totalmente artesano, reproduciendo fielmente la labor que se realizaba hace más de dos siglos. 

Se realiza una a una de modo manual, con herramientas idénticas a las utilizadas antaño. Los materiales utilizados son seleccionados en base a nuestra dilatada experiencia, reuniendo siempre la mejor calidad y garantía de durabilidad.

Para la realización del hidráulico, se amasan las materias primas junto al color, se encaja la trepa -la plantilla del dibujo- dentro del molde, sentándose ésta sobre una base de acero nivelada.

A continuación, se vierten las mezclas de distintos colores en los orificios, según el dibujo que se pretenda conseguir. A mayor número de colores y orificios, mayor será el tiempo empleado en la creación de las baldosas, lo cual repercutirá en el precio final de las mismas.

La segunda capa consiste en una mezcla de arena y cemento que aplicada sobre la capa anterior, completamente en seco, absorbe su humedad.

Seguidamente se aplica la capa inferior que conforma la parte inferior de la baldosa acabada, conformando una base sólida y adherente para su colocación en la obra.

Finalmente la losa es prensada y posteriormente extraída. Después las baldosas se trasladan a un almacén de curado.

Tras este complejo proceso, se introducen en bañeras de agua con objeto de aportarles la humedad requerida para la obtención de un fraguado perfecto.

A partir de esta fase, se necesita un fraguado de 28 días para su óptimo acabado final.